La Torta Extremeña tiene también una historia curiosa. Nace por accidente como el mismísimo
queso, y sin querer se crea lo que hoy en día es la más pura imagen de Extremadura.
queso, y sin querer se crea lo que hoy en día es la más pura imagen de Extremadura.
Nos encontramos con la Torta del Casar, Quesos de la Serena y de Barros. Tres quesos extremeños que tienen en común que son de leche de oveja y que han usado la flor del cardo como coagulante.
Por lo visto, en 1791, ya habían noticias de este queso. Los extremeños querían hacer algo parecido al sabor más clásico de La Mancha, pero algo no funcionaba. Nunca se endurecía. Utilizaban leche de oveja pero siempre les quedaba cremoso.
Cuajaban la leche con la flor del cardo (cuajo vegetal) y por accidente creaban uno de los quesos más sabrosos, intensos y perfectos de la geografía Española.
La mejor manera de degustarlo será cortando con cuchillo la parte superior, que a la vez nos servirá de tapa, y "mojar" en ella palitos de pan, hojaldres, verduras, untarlo...
Ahora necesitamos un vino tinto robusto, un buen Rivera del Guadiana, con muchos meses de barrica, pues la leche de oveja de sabor potente anula los taninos y hace que vino y queso vayan de la mano.
Es importante saber que cuando hayamos acabado con este manjar, lo podemos rellenar de carne picada y cebolla pochada, cerrar con su tapa original y darle un golpe de horno para tener un fantastico pastel de carne.
NO HAY QUESOS MALOS, SINO QUESOS CON CARACTERÍSTICAS
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